Lorenzo Ramos un periodista de Buenos Aires, viaja a Ushuaia, para realizar una nota sobre un misterioso ermitaño. Lorenzo habla con pobladores que dicen haberlo conocido: una vieja que la curó con un milagro, un cuatrero que lo encontró en el medio de la nada, una mujer que tuvo una relación íntima con él. Le dicen que venía escapando del norte, que había sido torturado, que era un santo. A través de las voces de los pobladores, Lorenzo reconstruye imágenes, que lo van obsesionando, ante la posibilidad de que “el loco de la cueva” sea su hermano.